Junio de 2003. Es el fin de un proyecto y una ilusión que nos roba años comiéndose a fuego lento, que cuyo resultado acaba con la apertura de nuestro Restaurante Xantar.

El nombre en gallego, nuestra lengua madre no es una casualidad, si no que su significado para nosotros no es sola la acción de comer, si no que es la juntanza alrededor de una comida con familia o amigos. El disfrute de momentos, con nuestra gente y en el que todos nos sentimos bien.

Por eso cada detalle, cada plato, está pensado para el disfrute de los comensales, en el mejor ambiente y con las mejores calidades con las que nuestro chef, hace magia en los fogones.

Una larga trayectoria de aprendizaje, errores y aciertos que nos han acompañado.